El presente trabajo tiene la finalidad de estudiar, para el caso del frigorífico Sirsil, las problemáticas vinculadas a la logística que surgen en el proceso de exportación de la carne bovina, tanto congelada como enfriada. Estas problemáticas pueden implicar demoras en el proceso de exportación, costos extra, e incluso pérdida de la calidad del producto. Al ser la carne un alimento perecedero, los tiempos de exportación son muy importantes. Para el análisis del proceso de exportación de la carne bovina, se toma como punto de partida el acondicionamiento de la carne, es decir, previo a ser envasada, y finaliza con la carga de la carne en el buque pronta para ser enviada a su destino. De modo de conocer la realidad de este sector, en este estudio se da una mirada al sector cárnico en el Uruguay y a la situación de éste a nivel internacional. A su vez, se realizaron entrevistas a empleados del frigorífico Sirsil, Solis Meat, Dinolar, entre otros, que contribuyeron a esclarecer aspectos del sector cárnico, a aportar información del funcionamiento del frigorífico y conocer en detalle su proceso logístico de la exportación de carne. En el frigorífico se pudo constatar problemas de sellado imperfecto de vacío e ineficiencias en el uso de bolsas para el empaque primario, por lo que se aconseja el uso de una máquina más moderna y uso de bolsas más resistentes. Se detectaron problemas en la traducción de las etiquetas en determinados idiomas (chino), debido a que éste puede modificar en ocasiones el significado de la palabra, por lo que se recomendó que la empresa adopte un software específico que evite que se modifiquen las traducciones. En cuanto al uso del contenedor, la empresa no utiliza la totalidad del volumen de éste, debido a que las cajas inferiores pueden ser propensas a romperse bajo presión, así como también el sellado al vacío de la carne. Para este problema se recomienda usar cajas de plástico plegables multiuso, que son más resistentes y ligeramente más pesadas, pero que permiten optimizar el uso del volumen sin aumentar demasiado el peso del contenedor. Por último, se estableció que Sirsil, al ser un frigorífico chico, presenta largos tiempos de producción (21 días) para poder completar un contenedor de un determinado corte, lo que dificulta la exportación de cortes enfriados a destinos lejanos como Japón, debido a que en total demoraría 86 días en llegar al cliente japonés. Teniendo en cuenta que Japón es un mercado que paga altos precios a nivel internacional, se recomienda que, para poder aprovechar este mercado, el frigorífico podría crear alianzas con otros frigoríficos, con el fin de exportar a través de cargas compartidas y de esta forma poder competir con los frigoríficos grandes. De esta manera se estaría llegando al consumidor japonés en 72 días, lo que deja 48 días de margen al minorista japonés para poder vender la carne.