En Montevideo (Uruguay) existen diferentes problemas asociados a los residuos sólidos urbanos: económicos, jurídicos, educativos, de gestión, entre otros. En esta tesis se realizó un análisis de los problemas ambientales generados por los residuos sólidos urbanos en Montevideo aplicando la metodología Análisis Causal Estratificado (CLA). El CLA propone un análisis vertical en cuatro niveles causales y un análisis horizontal de cada nivel para explorar posibles cursos de acción y actores involucrados para abordar el problema a corto, mediano y largo plazo. Metodológicamente se basó en una investigación cualitativa e implicó la articulación de diversas técnicas de investigación para recolectar e integrar información primaria y secundaria. Se realizó un análisis de documentación y bibliografía, y de la información relevada en un proyecto antecedente que incluyó talleres multiactorales realizados en 2018-2019. Se realizaron entrevistas semiestructuradas a actores clave y observación participante en actividades vinculadas a la problemática en 2020-2021. Los resultados muestran que, cotidianamente, Montevideo se percibe sucia y contaminada debido a problemas asociados al sistema de gestión de los residuos, a fallas en el manejo de la información, en la comunicación y la educación, así como a problemas vinculados al comportamiento humano. Se identificaron tres ejes principales de acción, así como nodos o posibles elementos de ruptura y transformación. Los ejes son: gestión de residuos y políticas públicas; economía y desarrollo; y comunicación, educación y cultura ambiental. Los posibles elementos de transformación se vinculan con diversos problemas producidos por los contenedores colectivos, la obsolescencia programada asociada a la sociedad de consumo y la educación fragmentada, entre otros. Para abordar este problema se deben implementar estrategias integrales y transdisciplinarias que consideren las características de cada territorio. Las acciones se deberían orientar al codiseño de circuitos locales con espacios de diálogo y acción que permitan conjugar diferentes saberes, intereses y cosmovisiones. Se observa la necesidad de configurar estrategias en las que la academia, la sociedad civil y las políticas públicas desarrollen respuestas colectivas de forma articulada considerando la multidimensionalidad del problema. Estos aspectos plantean oportunidades, con potencial innovador, para generar espacios de colaboración en la interfaz universidad-sociedad.