El software cada vez esta mas inmerso en la sociedad. Su uso intensivo hace que no concibamos la vida sin él. Muchas responsabilidades y toma de decisiones a nivel individual y como sociedad involucran algún tipo de software desde uno de propósito general (e.g., editor de texto) a mas críticos y complejos como los diseñados para tomar decisiones de forma autónoma (e.g., autos autónomos). Las necesidades cambiantes, la intensificación del uso de las tecnologías, y su criticidad, presentan dos grandes desafíos: (i) incorporar procesos de desarrollo ágiles que permitan crear software eficiente, oportuno y de calidad; y (ii) desarrollar en los profesionales de software las habilidades y capacidades requeridas para el desarrollo de software contemporáneo. Las universidades abordan el desafío de formar profesionales que cuenten con las competencias necesarias para la construcción de software. Los cursos /capstone/basados en proyectos, donde grupos de estudiantes siguiendo y adaptando un proceso de desarrollo de software llevan adelante un proyecto de construcción de un producto, buscan que los estudiantes apliquen su conocimiento previo en un problema real que sea lo mas similar a la industria para lograr que desarrollen distintas habilidades necesarias para la producción de software. El “Proyecto de Ingeniera de Software" (PIS) es un curso /capstone/basado en proyectos de desarrollo de software del que participan estudiantes de cuarto año de la carrera Ingeniería en Computación de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de la República de Uruguay. El proceso que se utiliza actualmente en el PIS es iterativo e incremental y dirigido (fuertemente) por planes; y pasaron diez años desde su última actualización. Esta tesis propone para el PIS un proceso de desarrollo ágil, llamado PISAgile, que guía el aprendizaje de los estudiantes y la construcción de software de calidad. Promueve la colaboración, experimentación de forma temprana y la reflexión para agregar valor, evolucionar y adaptarse a las necesidades cambiantes. PISAgile consta de tres fases: fase inicial, fase de construcción y fase de transición. En la fase inicial los estudiantes tienen un primer acercamiento al proyecto y proceso, se busca que entiendan las necesidades del cliente y logren conceptualizar el producto a construir. La fase de construcción tiene por objetivo la construcción y aceptación del producto de software. En la fase de transición se hace la transferencia final de los productos al cliente. PISAgile se aplicó a tres grupos de estudiantes en 2020 y para su evaluación se diseñaron, ejecutaron y analizaron encuestas a los distintos actores: estudiantes, docentes y clientes. En particular en esta tesis, por aspectos vinculados al alcance del trabajo, se presenta únicamente el análisis de la percepción de los estudiantes sobre distintos aspectos a evaluar. Principalmente se evaluaron las habilidades blandas. Los resultados indican que contar con un proceso ágil disciplinado y un curso como el PIS logra preparar a los estudiantes para su práctica profesional desarrollando tanto habilidades técnicas como blandas. Además, PISAgile sirvió para que los estudiantes pudieran construir software de calidad. Los estudiantes perciben que las fortalezas de PISAgile son contar con fases, iteraciones y roles e incorporar la reflexión y evaluación para la mejora continua. También entienden que el aspecto a mejorar es la forma en la que actualmente esta documentado PISAgile. Entendemos que es un importante aporte para el curso PIS contar con un proceso ágil especificado y actualizado que pueda evolucionar por cambios en el curso. Para la academia entendemos que es un aporte contar con un proceso concebido y evaluado en un contexto académico, que se puedan aplicar, y generar mayor conocimiento en la enseñanza de procesos y el aprendizaje de los estudiantes. Las principales líneas del trabajo futuro se orientan a realizar los ajustes que surgen de la evaluación, particularmente mejorar la documentación de PISAgile, implantarlo para todos los grupos de estudiantes del PIS y complementar la evaluación realizada con la percepción de docentes y clientes.