Las Áreas de Alto Valor de Conservación (AAVC) son identificadas por cada empresa, con baja participación de las terceras partes y sin validación estadística. Por este motivo, surge la necesidad de preservar las AAVC y toma relevancia el hecho de que la selección de las mismas se haga de forma participativa y con validez estadística. Dicho esto, el objetivo general de este trabajo es la identificación de modo participativo de potenciales AAVC según la definición del Forest Stewardship Council (FSC) en el litoral de Uruguay. La metodología utilizada es conocida como el ¨Método Q¨ y permite identificar percepciones sobre una determinada temática. El análisis involucra la aplicación secuencial de tres procedimientos estadísticos: correlación, análisis factorial y cálculo de escores de los factores y provee información sobre los diferentes puntos de vista de los individuos relacionados con la protección de áreas, pudiéndolos agrupar de acuerdo con sus similitudes y diferencias en relación con la temática en cuestión. Los resultados muestran que tanto el Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SNAP) como las AAVC, persiguen el mismo objetivo: la planificación de áreas para su conservación y que ambas pueden ser validadas como AAVC según el FSC. Los resultados muestran claramente que hay un gran interés por la conservación en términos generales y que esta sea a través de la delimitación y protección de sitios o áreas. En relación con los atributos a conservar, los resultados mostraron 3 perfiles diferenciados donde el mayor interés se evidencia por los atributos específicos ambientales. Con esta información se elabora un mapa de atributos identificados por las partes interesadas como prioritarios para conservar. Dicho mapa, que podrá ser utilizado como una fuente de información más a la hora de delimitar potenciales áreas a conservar, involucra a los actores afectados desde el principio del proceso siendo este aspecto el de mayor relevancia a destacar.