En un viaje imaginario se parte del libro manuscrito La ciudad sin nombre, de Joaquín Torres García, publicado en Montevideo en 1941, y se aborda el relato focalizando en las cartografías de ciudad que emergen del mismo. Las palabras y párrafos, así como los fragmentos de ciudad dibujados en el libro, exhiben un mundo atomizado, cuya lectura unitaria solo es posible a través de una visión fragmentada y yuxtapuesta. Se analizan la temporalidad constructivista, la espacialidad y geometría, los micropaisajes urbanos del puerto y el café, el ambiente nocturno y el paisaje humano de la ciudad. El viaje finaliza en la fuente simbólica o Monumento Cósmico, construido en el Parque Rodó de la ciudad de Montevideo y esbozado en la página final del libro manuscrito. Se reflexiona acerca de su materialidad y emplazamiento, así como de su condición simbólica. Asimismo, se hace referencia al contexto cultural y literario en Uruguay en la década del 40, en un sistema de relaciones que contribuye a relatar el contexto de este viaje imaginario.