El presente trabajo tiene como objetivo estudiar la incorporación y evolución de la mujer al mundo laboral, y en particular en el desempeño de cargos gerenciales en el ámbito público en nuestro país. En el marco teórico, abordamos los elementos que han llevado a que en la actualidad la mujer tenga una mayor participación en el mercado laboral. Identificamos los obstáculos y dificultades que se le presentan al acceder a un puesto de trabajo por su condición de género, así como las barreras culturales impuestas por la sociedad que le impiden ser considerada en un plano de igualdad con el hombre. Por último, analizamos la normativa vigente en el Uruguay que ha sido sustento de dicha evolución, la cual busca promover la participación equitativa entre géneros y la igualdad de derechos y oportunidades. La experiencia práctica consistió en entrevistar a mujeres que ocupan cargos gerenciales en diferentes Organismos del Sector Público a efectos de recabar información sobre sus características y experiencias personales en relación al acceso y desempeño de dichos cargos, así como su percepción en relación a la evolución de la representación femenina en el mencionado Sector y su opinión sobre el respaldo de la normativa vigente relativa al trabajo de la mujer. A efectos de poder extraer conclusiones más objetivas, realizamos entrevistas a hombres que desempeñan cargos similares y a dependientes integrantes de las organizaciones estudiadas. Dentro de las conclusiones obtenidas destacamos: Una marcada evolución en la participación de la mujer en Cargos Gerenciales en el Sector Público, pero no así en los Cargos de poder o ámbitos de decisión. La iniciativa de los últimos Gobiernos en promover e implantar políticas de equidad de género que acompañen y contribuyan a la mencionada evolución. La existencia de características y aptitudes personales que son propias de cada género y que por tanto, influyen en la forma de dirección y motivación del personal. Un notorio cambio en la mentalidad de la sociedad, que lleva a ubicar a las mujeres en un plano de igualdad, contando con las mismas oportunidades laborales y profesionales, aún reconociéndose la existencia de diferencias biológicas. Una clara diferencia entre el sector público y el privado en cuanto a la normativa que regula el trabajo de las mujeres.