Varicose veins resulting from pregnancies can and should be controlled medica!ly, Only very special cases should be subject to surgery in view of existent risks and greater uncertainty with respect to results.Surgery can be performed after pregnancy. Many authors sustain that surgery should be performed immediately after childbirth. Social and psycological reasons keep patients away at this stage, and they either reject the idea of surgery or defer it. This is fully justified in view of the. fact that there is great improvement after delivery and that the child demands all the mother's attention.Under these circumstances, the fact that varicose veins and their symptoms can be controlled medically during pregnancy, conspires against surgery,On the other hand the evolution of the disease involves no risk either for the mother or the unbornchild, which should best be avoided.Therefore we believe that radical surgery of varicose veins should not be performed during pregnancy, except in exceptional circumstances. These exceptional cases, which cannot be controlled by medical therapy, should be operated on between the fourth and sixth month of pregnancy.

Entendemos que las várices del embarazo pueden y deben ser controladas con medidas médicas. Sólo los casos muy especiales podrían ser sometidos a cirugía, conociendo los riesgos existentes y la mayor inseguridad respecto a los resultados.La cirugía encuentra su oportunidad Juego del embarazo. Muchos autores defienden la oportunidad de la cirugía en el puerperio inmediato. Razones sociales y psicológicas alejan las enfermas en esta etapa, no aceptando la cirugía o prefiriendo diferirla. Totalmente justificado, dado la mejoría experimentada postparto y la necesidad de atención del niño.Conspira contra la oportunidad operatoria en estas circunstancias, el hecho de que las várices y sus síntomas son controlables médicamente, durante el embarazo, con las medidas enunciadas.Por otro lado, la evolución de. la afección no comporta un riesgo materno o fetai, que deba ser evitado. Por todos los hechos enunciados, entendemos que la cirugía radical de las várices no encuentra su oportunidad en el estado grávido y tal indicación debe ser excepcional.Dichos casos excepcionales, incontrolables por terapia médica, deben ser intervenidos durante el segundotrimestre del embarazo.