Internet se ha convertido finalmente en "el tejido de nuestras vidas", tal como lo anunciaba en 2001 Manuel Castells, arraigándose en casi todas las dimensiones de esta como el trabajo, estudio, entretenimiento y ciudadanía, entre otras. De la misma manera internet es en un elemento relevante en la vida e niños y adolescentes, quienes al 2015 representaban un tercio de los internautas globales y se conectan cada vez a edades más tempranas. Esto ha ignificado grandes oportunidades pero también desafíos para garantizar la protección de estos en el espacio virtual, convirtiéndose esta en una creciente reocupación para los gobiernos, las escuelas y los adultos familiares. La temática es más aún compleja ya que estudios muestran que el nivel de dominio de internet por parte de menores de edad y la probabilidad de estos encuentren riesgos en dicho espacio están positivamente relacionados. El gobierno de Uruguay creó una "revolución digital" única a nivel global, ya que en 4 años prácticamente todos los niños y adolescentes tuvieron acceso a una omputadora e internet con el programa de gobierno, Plan Ceibal. Ceibal facilitó muchas oportunidades pero al mismo tiempo podría sugerirse que amplificó las amenazas en línea para menores. Los principales beneficiarios de Ceibal provienen de familias de nivel socioeconómico bajo, cuyos adultos familiares no contaban en la mayoría de los casos con experiencia previa con el uso de tecnologías digitales. Asimismo Ceibal representó un desafío para los docentes, ya ue en varios casos también accedían a una computadora por primera vez. Este estudio utiliza la literatura de referencia en el campo de la protección en línea de menores para estudiar el caso uruguayo explorando en qué medida las particularidades del Plan Ceibal y del contexto local pueden amplificar o restringir los riesgos que menores pueden experimentar al utilizar internet. Se argumentará que es relevante que el gobierno implemente estrategias educativas que aborden temas no exclusivamente vinculadas al uso de TIC, especialmente enfocadas en atender la violencia en centros educativos y educación sexual, ya que los riesgos en línea en sectores más vulnerables de la población podrían estar amplificándose debido a un déficit en este sentido.