La problemática nutricional más importante hoy es la obesidad y su desarrollo temprano predice un aumento a mediano y largo plazo de las Enfermedades Crónicas No Trasmisibles asociadas a la nutrición. Uno de los pilares de la Salud Pública debería ser el cuidado de su población infantil, posicionándose desde la prevención de la obesidad, abordando los factores que determinan su aparición en la niñez. En este contexto el presente proyecto tuvo como objetivo analizar la asociación de obesidad infantil con ingesta de alimentos ultraprocesados (UP) y bebidas azucaradas, controlando por estado nutricional y alimentación al nacer, horas de sueño, de pantalla y factores socioeconómicos y demográficos para obtener un perfil de riesgo actualizado que permita focalizar los esfuerzos de prevención. Se utilizaron diversas bases de datos (cohortes 2013 ronda 1 y 2, y 2018 de la "Encuesta de Nutrición, Desarrollo Infantil y Salud" (ENDIS) y cohorte 2015 del Centro de Pesquisas Epidemiológicas de Pelotas). Se realizó un análisis transversal utilizando datos de todos los niños preescolares procedentes de las encuestas poblacionales. Con las cohortes que tenian datos longitudinales desde los primeros 2 años hasta los 2 a 5 años se realizó un estudio caso-cohorte. Para el estudio caso-cohorte la población fue: niños de 2 a 4 años pertenecientes a las cohortes 2013 (menores de 2 años en ronda 1 y participantes en ronda 2) de la ENDIS y cohorte 2015 del Centro de Pesquisas Epidemiológicas de Pelotas. Resultados: La principal medida de resultado fue la obesidad definida como índice de masa corporal (IMC) para edad y sexo mayor o = 3 puntuaciones z, según los estándares de la OMS. La puntuación del consumo de UP fue la principal exposición medida. Aproximadamente el 5% de la muestra de los niños uruguayos y brasileños eran obesos. Se observó una relación entre consumo de UP y la obesidad (OR: 1,06 (IC 95%, 1,01-1,11). La puntuación del consumo de UP se asoció con la obesidad infantil en niños menores de 48 meses, OR: 1,09 (IC del 95%, 1,02-1,16). En el análisis longitudinal la principal medida de resultado fue la obesidad definida IMC para edad y sexo ? +3 puntuaciones z. Cada respuesta positiva de consumo habitual de UP se sumó para crear una puntuación de UP que iba de cero a seis o más UP (0; 1; 2; 3; 4; 5; 6 o más). La incidencia global de obesidad en estos niños pequeños latinoamericanos con una edad media de 48 meses fue del 4,1%. Se observó una relación entre el consumo de UP y la obesidad con significación estadística (RR: 1,10 (IC 95%, 1,02-1,18). El ajuste por el peso al nacer, la edad, el sexo, la lactancia materna, el país y el tiempo entre olas dio como resultado una relación similar pero sin significación estadística.