Este estudio es un aporte principalmente analítico al campo de la discapacidad y el género. El mismo tiene como objetivo conocer si la construcción de los estereotipos de género de niño/as y adolescentes sordos se ve condicionada por el manejo o no de la lengua de señas. Los lineamientos teóricos-metodológicos que sustentan el estudio responden a la matriz histórica crítica. La investigación se operacionalizó a partir de un enfoque cualitativo bajo entrevistas semi estructuradas con niñas, niños y las/os adolescentes sordos que viven en la ciudad de Florida, sus familias, actores relevantes de la comunidad sorda organizada y profesionales que trabajan en el campo de discapacidad en la ciudad. Los resultados obtenidos indican una alta interiorización de los estereotipos culturales de género en las niñas, niños y adolescentes sordos producto de una ideología patriarcal que se mantiene y reproduce en sus distintas manifestaciones a través del tiempo y de las instituciones. En los primero años las niñas y niños sordos interiorizan los patrones culturales a partir de la vista y el cuerpo. El mismo trasmite emociones, sensaciones y formas de ser y de estar dentro de una sociedad. La conceptualización que se haya realizado de la discapacidad es determinante para el posicionamiento, ya que una conceptualización basada en la “falta de” va a producir un vaciamiento de todos los contenidos de género. Se los acerca a imaginarios que los definen como seres: infantiles, asexuados y objetos de cuidado y protección. La lengua de señas influye positivamente en la vida de las personas sordas, es intrínseca, le brinda la oportunidad de objetivarse, cambiar su realidad y ejercer sus derechos. Esta monografía llega a reconocer sustancialmente a la persona sorda como una de las muchas formas de ser mujer y ser hombre dentro de una sociedad y una cultura