La península antártica ha mostrado una fuerte tendencia al calentamiento en los últimos años, y una acelerada retracción de sus glaciares, con consecuencias en el ambiente marino y las comunidades bentónicas. La meiofauna ha demostrado ser una herramienta útil para monitorear los efectos del cambio climático, además de cumplir un importante rol trófico y en los ciclos biogeoquímicos, sin embargo, actualmente el conocimiento sobre la meiofauna polar continúa siendo limitado. Este trabajo tuvo como objetivo explorar los taxones que integran la meiofauna antártica de la Bahía Collins (Isla Rey Jorge) y su relación con las propiedades biogeoquímicas del sedimento en áreas con distinta influencia glaciar. Para esto se extrajeron muestras de sedimento (draga van Veen) y meiofauna (minicorer) de 3 transectas: transecta 1 (estaciones 1A-1C) y 2 (2A- 2C), a 2000 y 3000 metros respectivamente del frente marino del Glaciar Collins; y transecta 3 (3A-3D), frente a la cañada de deshielo cercana a la Base Artigas. Para poder caracterizar las estaciones de muestreo, se estudió la granulometría del sedimento, el contenido orgánico y las variables físico-químicas del agua de fondo. Se identificaron en total 58383 individuos agrupados en 32 taxones, siendo los grupos más abundantes los nematodos (81%) y los copépodos (7,1%). La comunidad de meiofauna varió entre transectas en respuesta a la influencia glaciar, siendo más diversa y uniforme en la transecta 2 que en las otras, donde el mayor contenido orgánico y la presencia de sedimento más homogéneo sugirieron un menor impacto del glaciar en el área. En contraste, el aporte por escorrentía superficial de la cañada propició una comunidad menos diversa y uniforme en la transecta 3, dominada por nematodos, lo que podría deberse a la gran resistencia a perturbaciones en el ambiente por parte de este grupo. Los análisis de varianza entre transectas registraron diferencias significativas en las abundancias de cladóceros, tardígrados, ostrácodos, loricíferos, gastrotricos, bivalvos, y aplacóforos, mostrando que los taxones “raros” o poco frecuentes son más susceptibles a variaciones ambientales. La presencia de grupos sensibles al estrés ambiental en la transecta 1 sugirió un menor impacto en la estructura de la comunidad en la zona cercana al glaciar, en comparación con el área afectada por el deshielo de la cañada. Las diferencias en las abundancias de los grupos respondieron principalmente a variaciones en el contenido orgánico (CHO, TOC%) y parámetros físico-químicos del agua (temperatura y profundidad), y en menor medida a la granulometría del sedimento (limos y arcillas%).