Efecto macho, sincronización de celo y luteólisis en ovejas
Supervisor(es): Ungerfeld, Rodolfo
Resumen:
La introducción de carneros a ovejas prepúberes, en anestro estacional, anovulatorias en lactación, o en temporada reproductiva, que permanecieron aisladas de todo contacto con carneros estimula (en al menos una proporción de ellas) su ovulación (efecto macho). Por tanto, el efecto macho por sí solo, o en combinación con tratamientos hormonales es una opción que puede ser incluida en sistemas de producción. Sin embargo, a pesar de que el efecto macho ha sido ampliamente estudiado en ovejas en anestro, las ventajas de la utilización del efecto macho en ovejas cíclicas ha sido poco estudiada. En un ciclo estral normal, el aumento en la secreción de LH estimula el desarrollo folicular y la síntesis de estradiol. A su vez, el aumento de estradiol induce un aumento en el número de receptores uterinos de oxitocina, por lo que en la fase luteal tardía el útero responde a la oxitocina secretando PGF2?. Esto desencadena un proceso de retroalimentación positiva que finaliza con la luteólisis. Se ha observado que las ovejas cíclicas responden a la introducción de carneros con un incremento de la frecuencia de pulsos de LH sin importar el momento del ciclo. Este incremento se produce incluso en animales tratados con dispositivos con progestágenos. Por tanto, el efecto macho podría desencadenar respuestas similares a las que se dan durante una fase luteal normal. Como hipótesis general de esta tesis se planteó que el efecto macho es efectivo en sustituir parcialmente a la PGF2? durante la fase luteal tardía para inducir la presentación de celo. El objetivo general fue determinar si el efecto macho puede sustituir parcialmente el uso de PGF2? en un tratamiento de sincronización de celo en ovejas cíclicas. Para ello se realizaron dos experimentos. Para el primero se testeó la hipótesis de que en un protocolo de dos dosis de PGF2? separadas 13 días, el efecto macho sustituye la mitad de la segunda dosis. Dados los resultados de este experimento, en el que se observó que el efecto macho puede desencadenar y adelantar la manifestación de celo en al menos una proporción de ovejas, se planteó la hipótesis de que el día de la fase luteal tardía en que se estimula a las ovejas afecta la respuesta al tratamiento. Por ello se diseñó un segundo experimento donde se testeó el uso de media dosis de PGF2? administrada al momento de la introducción de los machos en diferentes momentos de la fase luteal, pero no se observó diferencia en la respuesta estral de las ovejas según el día en que fueron estimuladas. En conclusión, el efecto macho fue efectivo al sustituir media dosis de PGF2? en una parte menor de la majada, aunque la respuesta no estuvo relacionada con el día de la fase luteal tardía en la cual las ovejas son estimuladas.
2014 | |
OVEJAS SINCRONIZACION DEL CELO EFECTO MACHO |
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Español | |
Universidad de la República | |
COLIBRI | |
https://hdl.handle.net/20.500.12008/24042 | |
Acceso abierto | |
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Sumario: | La introducción de carneros a ovejas prepúberes, en anestro estacional, anovulatorias en lactación, o en temporada reproductiva, que permanecieron aisladas de todo contacto con carneros estimula (en al menos una proporción de ellas) su ovulación (efecto macho). Por tanto, el efecto macho por sí solo, o en combinación con tratamientos hormonales es una opción que puede ser incluida en sistemas de producción. Sin embargo, a pesar de que el efecto macho ha sido ampliamente estudiado en ovejas en anestro, las ventajas de la utilización del efecto macho en ovejas cíclicas ha sido poco estudiada. En un ciclo estral normal, el aumento en la secreción de LH estimula el desarrollo folicular y la síntesis de estradiol. A su vez, el aumento de estradiol induce un aumento en el número de receptores uterinos de oxitocina, por lo que en la fase luteal tardía el útero responde a la oxitocina secretando PGF2?. Esto desencadena un proceso de retroalimentación positiva que finaliza con la luteólisis. Se ha observado que las ovejas cíclicas responden a la introducción de carneros con un incremento de la frecuencia de pulsos de LH sin importar el momento del ciclo. Este incremento se produce incluso en animales tratados con dispositivos con progestágenos. Por tanto, el efecto macho podría desencadenar respuestas similares a las que se dan durante una fase luteal normal. Como hipótesis general de esta tesis se planteó que el efecto macho es efectivo en sustituir parcialmente a la PGF2? durante la fase luteal tardía para inducir la presentación de celo. El objetivo general fue determinar si el efecto macho puede sustituir parcialmente el uso de PGF2? en un tratamiento de sincronización de celo en ovejas cíclicas. Para ello se realizaron dos experimentos. Para el primero se testeó la hipótesis de que en un protocolo de dos dosis de PGF2? separadas 13 días, el efecto macho sustituye la mitad de la segunda dosis. Dados los resultados de este experimento, en el que se observó que el efecto macho puede desencadenar y adelantar la manifestación de celo en al menos una proporción de ovejas, se planteó la hipótesis de que el día de la fase luteal tardía en que se estimula a las ovejas afecta la respuesta al tratamiento. Por ello se diseñó un segundo experimento donde se testeó el uso de media dosis de PGF2? administrada al momento de la introducción de los machos en diferentes momentos de la fase luteal, pero no se observó diferencia en la respuesta estral de las ovejas según el día en que fueron estimuladas. En conclusión, el efecto macho fue efectivo al sustituir media dosis de PGF2? en una parte menor de la majada, aunque la respuesta no estuvo relacionada con el día de la fase luteal tardía en la cual las ovejas son estimuladas. |
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