El destete artificial se aplica normalmente en los sistemas de producción ovina ya que mejora los resultados productivos y reproductivos. En los sistemas productivos, el destete artificial se realiza antes de lo que ocurriría de manera natural, por lo que luego del mismo se observa una marcada respuesta de estrés en las ovejas y corderos. En una prueba de separación maternal corta, las hembras vocalizan más que los machos, posiblemente debido a que el vínculo con la madre es más fuerte. Los machos tienen mayor independencia nutricional probablemente debido a que nacen con mayor peso y tienen mayor desarrollo corporal. El objetivo de esta tesis fue comparar la respuesta de estrés al destete entre corderos machos y hembras. El estudio se realizó en el Campo Experimental Nº 1 de la Facultad de Veterinaria, Migues, Canelones, Uruguay. Para el estudio se utilizaron 30 ovejas Corriedale multíparas de partos simples y sus corderos (15 machos y 15 hembras). Las ovejas, madres de los corderos machos y hembras, eran homogéneas en peso y en fecha de parto. A los corderos se les realizó destete artificial abrupto a los 90 días de edad (día 0). Luego del destete, los corderos se ubicaron en dos parcelas a una distancia de aproximadamente 150 m de las madres, impidiendo el contacto visual y olfativo con las mismas. Se realizaron registros comportamentales desde el día -3 hasta el día 3, mediante registros scan cada 10 min, durante 3 h en la mañana y 3 h en la tarde. Se registró la frecuencia en que los animales estuvieron parados, echados, caminando, pastando, rumiando, vocalizando y costeando. Además, antes del destete, durante el mismo periodo de observación, se registró la cantidad y duración de los amamantamientos, intentos y rechazos de amamantamiento. Sumado a estos registros, se pesaron y se les extrajo sangre para determinación de las concentraciones de proteínas séricas totales (PT), albúmina, globulinas, hematocrito y glóbulos blancos los días -5 y 5. La cantidad y duración de amamantamientos, los intentos y rechazos de amamantamiento, y la ganancia diaria de peso se compararon entre grupos mediante ANOVA. La frecuencia de cada comportamiento, el peso, las concentraciones de PT, albúmina y globulinas, la cantidad de células blancas y el hematocrito fueron comparados entre los grupos con el modelo mixto de SAS (se consideró el sexo, los días y la interacción entre ellos como efectos principales y los corderos como efecto aleatorio). Se registró una mayor frecuencia del comportamiento parado en los machos que en las hembras (P<0,0001). Las hembras presentan una mayor frecuencia echadas que los machos (P<0,0001) después del destete. En relación a los comportamientos alimenticios, los machos presentaron mayor frecuencia pastando y rumiando que las hembras (P<0,0001 para ambos comportamientos). A los 5 días de realizado el destete, las hembras presentaron una mayor concentración de albumina que los machos (P= 0,01). Los machos presentaron una mayor ganancia diaria de peso que las hembras, (P=0,03). En conclusión, las hembras sufrieron una mayor respuesta de estrés al destete que los machos. Además, los machos se adaptaron mejor a este manejo que las hembras, probablemente por presentar una mayor independencia nutricional de su madre, adaptándose mejor a los cambios nutricionales al destete.