Factores de manejo del cultivo que influyen sobre la conservación poscosecha de cebolla en sistemas prediales

Vieta Delgado, Adriana Laura

Supervisor(es): Galván, Guillermo - Zaccari, Fernanda

Resumen:

La oferta anual de cebolla en Uruguay depende en gran medida de la duración de la conservación poscosecha realizada en predios comerciales familiares con diversidad de sistemas de producción. El almacenamiento generalmente dura de cinco a siete meses. La determinación temprana de la capacidad de conservación poscosecha de un lote de cebolla sería una herramienta de utilidad práctica. Este estudio tuvo por objetivos (1) evaluar y jerarquizar el efecto de la variedad, la fecha de cosecha, el estado de madurez y sanitario a la cosecha, y las formas de almacenamiento sobre la calidad y cantidad de los bulbos conservados a los 150 días luego de la cosecha (150 ddc) en predios comerciales en dos zafras de producción; y (2) validar un test de incubación acelerada para determinar tempranamente el potencial de conservación poscosecha de lotes comerciales. El relevamiento de predios comerciales comprendió 42 cultivos en dos zafras (2015-16 y 2016-17). La conservación de cebollas fue diferente entre zafras, con 71,7 % en 2015-16 y 85,3 % en 2016-17 de bulbos con calidad comercial a los 150 ddc. La conservación de las variedades de Día Intermedio (82% en promedio) no difirió de las de Día Largo (79%). La fecha de cosecha y el sistema de almacenamiento no tuvieron efecto significativo sobre la conservación poscosecha de las cebollas. Lotes de bulbos con bajo número de catáfilas protectoras al momento de la cosecha (< 2,1), con mayor porcentaje de hojas verdes (> 55%) y menos de 1% de bulbos con bacteriosis al inicio del almacenamiento mostraron la mayor conservación de las cebollas (91,6%). El número de catáfilas protectoras (secas) formadas al momento de la cosecha fue la variable de mayor correlación negativa (r = 0,62; p =0,0001) con la conservación de las cebollas (150 ddc). El test de incubación acelerada (dos semanas a 30 ± 2 °C, 98-100 % HR) fue puesto en práctica con bulbos muestreados al inicio del almacenamiento. La cantidad y severidad de bulbos con bacterias fue un buen predictor de la conservación poscosecha a los 150 ddc (r = ―0,81, p≤ 0,0001), constituyendo una herramienta simple y buena predictora del potencial de almacenamiento de las cebollas.


Detalles Bibliográficos
2020
Bacteriosis
Cerrado del cuello
Catáfilas protectoras
Estructuras de conservación poscosecha
CEBOLLA
COSECHA
CONSERVACION
BACTERIOSIS
Español
Universidad de la República
COLIBRI
https://hdl.handle.net/20.500.12008/32563
Acceso abierto
Licencia Creative Commons Atribución - No Comercial - Sin Derivadas (CC - By-NC-ND 4.0)
Resumen:
Sumario:La oferta anual de cebolla en Uruguay depende en gran medida de la duración de la conservación poscosecha realizada en predios comerciales familiares con diversidad de sistemas de producción. El almacenamiento generalmente dura de cinco a siete meses. La determinación temprana de la capacidad de conservación poscosecha de un lote de cebolla sería una herramienta de utilidad práctica. Este estudio tuvo por objetivos (1) evaluar y jerarquizar el efecto de la variedad, la fecha de cosecha, el estado de madurez y sanitario a la cosecha, y las formas de almacenamiento sobre la calidad y cantidad de los bulbos conservados a los 150 días luego de la cosecha (150 ddc) en predios comerciales en dos zafras de producción; y (2) validar un test de incubación acelerada para determinar tempranamente el potencial de conservación poscosecha de lotes comerciales. El relevamiento de predios comerciales comprendió 42 cultivos en dos zafras (2015-16 y 2016-17). La conservación de cebollas fue diferente entre zafras, con 71,7 % en 2015-16 y 85,3 % en 2016-17 de bulbos con calidad comercial a los 150 ddc. La conservación de las variedades de Día Intermedio (82% en promedio) no difirió de las de Día Largo (79%). La fecha de cosecha y el sistema de almacenamiento no tuvieron efecto significativo sobre la conservación poscosecha de las cebollas. Lotes de bulbos con bajo número de catáfilas protectoras al momento de la cosecha (< 2,1), con mayor porcentaje de hojas verdes (> 55%) y menos de 1% de bulbos con bacteriosis al inicio del almacenamiento mostraron la mayor conservación de las cebollas (91,6%). El número de catáfilas protectoras (secas) formadas al momento de la cosecha fue la variable de mayor correlación negativa (r = 0,62; p =0,0001) con la conservación de las cebollas (150 ddc). El test de incubación acelerada (dos semanas a 30 ± 2 °C, 98-100 % HR) fue puesto en práctica con bulbos muestreados al inicio del almacenamiento. La cantidad y severidad de bulbos con bacterias fue un buen predictor de la conservación poscosecha a los 150 ddc (r = ―0,81, p≤ 0,0001), constituyendo una herramienta simple y buena predictora del potencial de almacenamiento de las cebollas.