Desde el pasado 1° de julio de 2007 rige en Uruguay un Nuevo Sistema Tributario (NST), que introdujo la modernización de la Administración Tributaria. Según se expusiera en la Sesión Parlamentaria del día 13 de marzo de 20061, el mismo se diseñó teniendo como principales objetivos:la equidad, la eficiencia, y el estímulo a la inversión productiva. En particular, el objetivo de equidad procura acercar la tributación a la capacidad contributiva de los contribuyentes, lo que introduce la necesidad de exponer en el desarrollo del presente trabajo el concepto de capacidad contributiva que vierte la Doctrina. Antes de que comenzaraaregir la Ley18.083de Reforma Tributaria, en el sistema impositivo de nuestro país, lasrentas eran gravadas a través del Impuesto a la Renta de Industria y Comercio (IRIC), del Impuesto a la Renta Agropecuaria (IRA), del Impuesto a las Comisiones (ICOM), y del Impuesto a las Retribuciones Personales (IRP).Este NST, derogando los impuestos antes mencionados, estructuró la imposición a la renta por cédulas que dependiendo de su naturaleza determinaron la creación del Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF), del Impuesto a la Renta de los No Residentes (IRNR), y del Impuesto a la Renta de las Actividades Económicas (IRAE). Esta nueva estructura, se articula con el concepto de residencia fiscal introducido por la Ley de Reforma Tributaria. El mismo se incorpora como eje transversal en el diseño de la nueva estructura tributaria, y por lo tanto su entendimiento es fundamental como punto de partida para el análisis. Es así, quesi el contribuyente cumple con la condición