Automedicación: ¿un problema o una solución?
Resumen:
La prescripción farmacológica constituye una de las acciones más emblemáticas del accionar médico, ya que la misma “sella” la evaluación que acaba de realizar el profesional para un paciente en particular. Esta resume casi en un solo acto toda la evaluación realizada (agrupación sindromática, diagnóstico, fisiopatología, selección farmacológica) para un paciente, llevando implícitos conocimientos técnicos (fisiopatológicos, clínicos, farmacológicos); y “no técnicos”, por así mencionar, que incluyen aquellos aspectos sociales, culturales, emocionales, entre otros. Poder integrar todos estos para aplicarlos en un individuo en particular que cursa un proceso salud-enfermedad pasible de tratamiento farmacológico, aboga por el tan preciado principio del “uso racional de los medicamentos” (1,2). Este cometido es uno de los pilares en la terapéutica farmacológica que requiere de un ejercicio clínico constante, basado en sólidos conocimientos técnicos, para aproximarnos a la “mejor prescripción” para un individuo particular, en un momento particular.
2024 | |
AUTOMEDICACION UTILIZACION DE MEDICAMENTOS ESTRATEGIAS DE SALUD POLÍTICA NACIONAL DE MEDICAMENTOS |
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Español | |
Universidad de la República | |
COLIBRI | |
https://hdl.handle.net/20.500.12008/43780 | |
Acceso abierto | |
Licencia Creative Commons Atribución (CC - By 4.0) |
Sumario: | La prescripción farmacológica constituye una de las acciones más emblemáticas del accionar médico, ya que la misma “sella” la evaluación que acaba de realizar el profesional para un paciente en particular. Esta resume casi en un solo acto toda la evaluación realizada (agrupación sindromática, diagnóstico, fisiopatología, selección farmacológica) para un paciente, llevando implícitos conocimientos técnicos (fisiopatológicos, clínicos, farmacológicos); y “no técnicos”, por así mencionar, que incluyen aquellos aspectos sociales, culturales, emocionales, entre otros. Poder integrar todos estos para aplicarlos en un individuo en particular que cursa un proceso salud-enfermedad pasible de tratamiento farmacológico, aboga por el tan preciado principio del “uso racional de los medicamentos” (1,2). Este cometido es uno de los pilares en la terapéutica farmacológica que requiere de un ejercicio clínico constante, basado en sólidos conocimientos técnicos, para aproximarnos a la “mejor prescripción” para un individuo particular, en un momento particular. |
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