¿La dominación masculina en entredicho?: androcentrismo y "crisis de masculinidad" en la producción científica reciente
Resumen:
La problematización de las relaciones de género evoca prácticas sociales en las que los hablantes se perciben a sí mismos irremediablemente involucrados. Esto, porque las relaciones de género se muestran amalgamadas con la anatomía de nuestros cuerpos. Se asemejan así a las identidades étnicas: su extraordinaria fuerza persuasiva reside en la colonización socio-cultural de atributos físicos. Solapadas tras diferencias inmediatamente perceptibles, las determinaciones sociales de estas relaciones se vuelven virtualmente "invisibles". La evidencia abrumadora que transmiten los sentidos, se torna indiscutible por antonomasia. El carácter "intimista" y perturbador de la tematización del género, la banalización camuflada en la ironía o el chiste, o -más flagrante- su confinamiento a "cuestiones de mujeres", parecerían denunciar una mirada que incomoda porque se dirige a plexos no problematizados del mundo de la vida. O simplemente, porque jaquea la dominación masculina.
2000 | |
Género Crisis Masculinidad HOMBRES IDENTIDAD CULTURAL CIENCIAS SOCIALES |
|
Español | |
Universidad de la República | |
COLIBRI | |
https://hdl.handle.net/20.500.12008/27738 | |
Acceso abierto | |
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Sumario: | La problematización de las relaciones de género evoca prácticas sociales en las que los hablantes se perciben a sí mismos irremediablemente involucrados. Esto, porque las relaciones de género se muestran amalgamadas con la anatomía de nuestros cuerpos. Se asemejan así a las identidades étnicas: su extraordinaria fuerza persuasiva reside en la colonización socio-cultural de atributos físicos. Solapadas tras diferencias inmediatamente perceptibles, las determinaciones sociales de estas relaciones se vuelven virtualmente "invisibles". La evidencia abrumadora que transmiten los sentidos, se torna indiscutible por antonomasia. El carácter "intimista" y perturbador de la tematización del género, la banalización camuflada en la ironía o el chiste, o -más flagrante- su confinamiento a "cuestiones de mujeres", parecerían denunciar una mirada que incomoda porque se dirige a plexos no problematizados del mundo de la vida. O simplemente, porque jaquea la dominación masculina. |
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