El dibujo habitado

Patiño Roquero, Soledad

Supervisor(es): Seguí de la Riva, Javier - Pantaleón Panario, Carlos

Resumen:

Este es un ensayo sobre un dibujo, el de la portada, que como cualquier otro tiene una cualidad visible, pero contiene también lo invisible, un sentido múltiple y tridimensional, sintetizado en una imagen que parece plana. Hecho a mano, el dibujo surge del encuentro entre un sujeto particular y aquello que quería aprehender. Es el resultado tangible de un dibujar relacional que configura un mundo en un papel, un espacio entre donde lo dicotómico no tiene cabida, pues allí lo posible y lo impensable casi se solapan, y lo que parece inverosímil desde fuera es verdadero para quien lo habita. Es un dibujo que parece limitarse a ilustrar una casa, pero que contiene varios planos inadvertidos a simple vista. Como en todo mundo soñado, que expande el mundo conocido, lo diurno convive con lo nocturno, que suele ser más difícil de atrapar, y es un fenómeno asombroso cuando se vuelve figura, iluminado por un recuerdo que trae consigo una metáfora dentro de otra metáfora. La tarea de descubrir y explicar estos planos superpuestos involucró a la autora, que encontró un método a través del arte para mirar con extrañeza lo cotidiano y descubrir lo nuevo, lo que antes no había visto en él. Dado que esta narración no busca concluir, sino abrir puertas de entrada al mundo creado, su estructura es ramificada y circular. Los habitantes de este mundo crean, a su vez, relatos propios, y cada uno convoca un universo personal, pero sus historias se entrelazan en torno al dibujo habitado.


Detalles Bibliográficos
2021
COMUNICACIÓN VISUAL
ARTE Y TECNICA DE DIBUJAR
PROCESO CREATIVO
Español
Universidad de la República
COLIBRI
https://hdl.handle.net/20.500.12008/31006
Acceso abierto
Licencia Creative Commons Atribución - No Comercial - Sin Derivadas (CC - By-NC-ND 4.0)
Resumen:
Sumario:Este es un ensayo sobre un dibujo, el de la portada, que como cualquier otro tiene una cualidad visible, pero contiene también lo invisible, un sentido múltiple y tridimensional, sintetizado en una imagen que parece plana. Hecho a mano, el dibujo surge del encuentro entre un sujeto particular y aquello que quería aprehender. Es el resultado tangible de un dibujar relacional que configura un mundo en un papel, un espacio entre donde lo dicotómico no tiene cabida, pues allí lo posible y lo impensable casi se solapan, y lo que parece inverosímil desde fuera es verdadero para quien lo habita. Es un dibujo que parece limitarse a ilustrar una casa, pero que contiene varios planos inadvertidos a simple vista. Como en todo mundo soñado, que expande el mundo conocido, lo diurno convive con lo nocturno, que suele ser más difícil de atrapar, y es un fenómeno asombroso cuando se vuelve figura, iluminado por un recuerdo que trae consigo una metáfora dentro de otra metáfora. La tarea de descubrir y explicar estos planos superpuestos involucró a la autora, que encontró un método a través del arte para mirar con extrañeza lo cotidiano y descubrir lo nuevo, lo que antes no había visto en él. Dado que esta narración no busca concluir, sino abrir puertas de entrada al mundo creado, su estructura es ramificada y circular. Los habitantes de este mundo crean, a su vez, relatos propios, y cada uno convoca un universo personal, pero sus historias se entrelazan en torno al dibujo habitado.