La economía industrial desarrollada en los últimos doscientos años, ha impulsado una prosperidad productiva, social y económica sin precedentes, facilitada en gran medida, por el surgimiento de nuevas tecnologías. Sin embargo, los impactos negativos tanto sociales como ambientales de este sistema industrial y económico son masivos, acumulativos y continuarán en crecimiento con el devenir de los años, por lo que resultan necesarios nuevos enfoques sostenibles para mitigarlos. La Economía circular surge como un modelo alternativo de producción y consumo sostenible propuesto para hacer frente a los desafíos ambientales de la actualidad y el futuro. Este modelo aboga por regenerar los sistemas naturales, diseñando productos y servicios que mantengan su valor el mayor tiempo posible, sin generar desechos, recuperando su valor al finalizar los ciclos de uso y utilizando materiales que puedan incorporarse de manera segura al ambiente. La aplicación de los distintos habilitadores tecnológicos de la Industria 4.0, pertenecientes a la denominada cuarta revolución industrial, a menudo se incluyen como un impulsor para la que la transición hacia un sistema circular sea efectiva. Si bien el interés a nivel mundial en ambos temas ha aumentado en las últimas décadas por parte de políticos, profesionales y académicos, generalmente se describen como dos campos de investigación independientes. Sin embargo en los últimos años se ha producido un aumento de estudios que analizan su interconexión y posibilidades de acción en conjunto. El presente trabajo establece un marco integrador de ambas perspectivas, en una búsqueda por ampliar la literatura de vanguardia, realizando una exploración bibliográfica para extraer los conceptos claves de ambos temas y realizar un análisis de las distintas interconexiones a través del estudio de casos, estableciendo un marco de discusión sobre la relación potencialmente beneficiosa entre la Industria 4.0 y la Economía circular.