La bioestimulación se refiere a la comunicación entre macho y hembra en la que intervienen sustancias químicas volátiles, secretadas y excretadas por glándulas cutáneas o liberadas en la orina y heces. Esta técnica resulta de la exposición de machos enteros, novillos o vacas androgenizadas, frente a un rodeo de hembras previamente aisladas durante cierto tiempo. El objetivo de este trabajo fue evaluar si la exposición de vaquillones pre-púberes ante novillos androgenizados previo al servicio, se relaciona con aumentos en los índices de preñez. Además, comparar la respuesta al efecto, según la variación de peso. Se utilizaron 246 hembras, distribuidas en dos grupos homogéneos, uno para recibir bioestimulación y el otro como testigo (sin bioestimulación). Además, cada grupo se subdividió en 3 categorías según el peso (bajo: 240-269,5 kg; medio: 270-309,5 kg; alto: 310-360 kg). Las vaquillonas estuvieron aisladas del contacto con toros por más de 30 días previos al comienzo del experimento. Seguidamente se realizó, la exposición de uno de los grupos durante 15 días, antes del servicio por monta natural. No se encontraron diferencias significativas en la variación de peso entre las vaquillonas bioestimuladas y las que se encontraban aisladas de machos. Dentro de los 2 grupos experimentales no se observaron diferencias en la tasa de preñez registradas a los 15 días post-servicio, pero sí la tasa de preñez fue mayor a los 30 días de comenzado el entore en las vaquillonas de peso alto bioestimuladas. En conclusión, la bioestimulación previa a un entore de otoño, en que las vaquillonas perdieron peso, determinó una mayor tasa de preñez en las vaquillonas de peso corporal alto.