Se analiza la utilización de los hormigones de alta resistencia (HAR) y hormigones autocompactantes (HAC) en obras de arquitectura en el medio uruguayo. Si bien dichos materiales han sido utilizados profusamente a nivel mundial desde la década del 70 y 90 del siglo XX respectivamente, en Uruguay su uso se ha hecho más frecuente en las últimas décadas con el fin de cumplir las exigencias de mayor rentabilidad y/o calidad en terminación del hormigón. En esta tesis se estudia la viabilidad económica de los hormigones de alto desempeño (HAD), se compara los HAR con los hormigones convencionales (HC) y se investiga cómo son utilizados los HAC en nuestro medio y sus costos reales. Con este fin, se plantea el estudio de tres casos concretos, a saber: un edificio con destino vivienda con HAD en primeros niveles donde se utilizaron hormigones de hasta Fck = 60 MPa; un edificio con destino hotel con HAD en las fundaciones debido a las características del suelo y en los primeros niveles con una resistencia a la compresión a los 28 días de Fck = 45 MPa; y un hotel con hormigón Fck = 30 MPa ejecutado en la década del 90, el cual significó un desafío en su época para las empresas locales proveedoras de hormigón ya que fue uno de los primeros hormigones en ejecutarse con una resistencia a la compresión de estas características, que hoy es un HC pero en la década del 90 era la máxima resistencia lograda en el medio uruguayo. Los resultados obtenidos en los mencionados estudios demuestran que el menor volumen que implica la utilización de HAD en lugar de HC hacen su utilización más rentable —no obstante su costo mayor por m3— al disminuir las cantidades de hormigón requeridas por la estructura. El trabajo concluye que: la utilización en el medio del HAR es viable económicamente. Además se hallaron otros beneficios como: la reducción de la dimensión de los pilares y el consiguiente aumento del área en planta; la utilización de menores volúmenes de hormigón en pilares, los cuales en el estudio de caso 3 significaron una reducción del volumen de hormigón para resistencias de Fck = 60 MPa y Fck = 45 MPa de un 50% y 32% respectivamente; el consiguiente ahorro en el consumo de los materiales necesarios para su fabricación —que en los estudios de casos 1 y 2 alcanzó el 5% de los costos totales del volumen del hormigón; la reutilización de residuos de otras industrias. La oportunidad de acceder a los beneficios indicados requiere que desde la industria de la construcción local se trabaje en la formación específica —incluyendo profesionales, técnicos y personal obrero— con respecto al HAD y concretamente a su puesta en obra, dejando atrás la práctica de utilizar el HAD en todas las piezas de la estructura, empleándolo solamente en aquellas donde estrictamente es requerido, y con las resistencias correctas.